Despedida de soltero en la sierra de la demanda. 02-03 sep 2006.

Como el resto de los carbonillas se mueven menos que los ojos de espinete opte por volverme a apuntar con el Anfeta a otro de sus "experimentos mamooth". Esta vez fue a una despedida de soltero en bici que organizo a unos chavales en el pueblo riojano de Ezcaray (precioso pueblo que da nombre, creo, a la estacion cercana en plena sierra de la demanda: Valdezcaray, valz significa estacion de esqui en riojano y ezcaray, pueblo). Allí tenemos un grupo de amiguetes ciclistas que siempre nos acogen de forma insuperable (Carlos, Juanma, Aitor, Fefa, Manu...etc). El caso es que llame a Mar y le hable de la posibilidad de pasar un buen fin de semana bicivolador, al mas puro estilo Aton, es decir, overthemarh (sobre la marcha). Resultado final tutti-frutti. Overthemarh recogi en Madrid a uno de los de la despedida que caminaba over muletas, Mar llevó a otro que venia de Barcelona y el resto fue en la flecha de plata con el Anfeta; cuando llegamos nos espera Vidal un amigo de Mar que hizo la transpi con ella. Todo se fue mezclando de forma espontánea, curiosa y muy divertida. El escenario este pueblo de la rioja, los actores un grupo de chavales ávidos de alcohol, y juerga, dos carbonillas "controlando" el evento, Mar, Vidal que lo miraba todo con algo de desconcierto y el grupo de pilotos locales (quepajaombree). Resultado cogorzon el Viernes y el Sabado. Resacas mañaneras con sueño insostenible que pronto remitian ante rutas épicas (tomaa yaa la fraasee). El Sabado tras gastar una broma a los chavales en la que juanma-piloto-local se hacia pasar por lugareño cazador que defendìa sus propiedades escopeta en mano, nos fuímos con el tio que mas rutas sabe, GPS, a dar una vuelta completa a la sierra de la demanda: 25 kms de intensa subida con un calor de los que ya conocemos, sube y baja por el rondal y bajada buenisisima por la estacion de Valdezcaray (ya os he explicado de donde viene el nombre). Al llegar baño en la piscina municipal y rondal de cervezas. Los de la despedida poco duchos en el arte del "pedaleo", sobre bici, el otro lo controlan perfectamente, habian hecho con el Anfeta y sus bicis de test la bajada del gr que cruza el hayedo. Los copilotos que habiamos traido Mar y yo en el coche (los dos que no montaban en bici) habian realizado su descenso particular la noche del Viernes. Nos contaba el Anfeta sobrecogido que de vuelta al hotel ebrios de borrachera bebida habian hecho una parada técnica a esto de las 6 de la mañana en un banco para que el de la muleta descansase; el sueño sorprendio al de la muleta y el último escalón del albergue al amigo que se dejo los dientes en él, pero nadie sorprendio al que le robo la muleta al que dormia en el banco. Total, uno llegó gateando y sin un piño y el otro cojeando y sin muleta; lo peor es que cuando se levantaron a las 3 de la tarde del dia siguiente tardaron un rato el recordar. Sabado night more cachodeeishon: salimos con los de la despedida que entraron a todo lo que se movia con el juego de las camisetas que propuso Anfeta, otra vez 5 de la mañana, y el dia siguiente ruta superbambi de 25 kms para ver, viva España, el partido de basquet y tomarnos un corderito en "la vieja bodega". Triste despedida y hasta la próxima.